miércoles, 1 de junio de 2011

Austin Daniels deja todo y se pone un videoclub en Las Toninas




Cuando vio que el 2011 se ponía picante con el tema de las elecciones y esas cosas, tomó (esta vez más que la ginebrita diaria) la decisión de instalarse en la costa bonaerense. “De última, si me eligen presidente, gobierno todo desde acá y listorti”, dijo disfrutando de la época otoñal, en bata de toalla, con pantuflas en forma de tigre y degustando un clericó que le manchó un poquito los pantalones.

El Presidente del Partido Berretista Auténtico, Austin Daniels, se tomó el palo e instaló un videoclub muy bien puesto (el negocio, eh), con todas las de la ley. Las Toninas era el lugar elegido por Daniels para veranear, hasta que pensó que también podía otoñar, invernar y primaverar, ya que estaba. “Después del verano, alquilar es más toraba y vi el negocio. Cuando se me ocurrió esto de alquilar películas me di cuenta de mi capacidad empresaria. Vi el negocio, lo vi”, dijo exaltado Austin Daniels. Sin embargo, para los afiliados al PBA la sorpresa no fue nada grata, sobre todo porque Daniels alquila en Las Toninas Beach una carpa que le paga el partido (o sea los giles que están afiliados) y ahora el gasto se va a extender por todo el año. Ante la pregunta si se va a presentar a las elecciones nacionales de este año, Austin respondió: “Andá a saber. Ahora estoy acá con el clericó, el Olé y el chingui chingui de fondo y no me dan ganas de tomarme el subte C y hacer combinación con la A hasta Plaza de Mayo todos los días para ir a la Casa Rosada. Si el pueblo me elige como presidente, gobierno desde acá y listorti. Ahí está, le digo a alguno que presente un proyecto para trasladar la capital hasta Las Toninas. Ves, si es así, me presento para ser presidente. Igual a la gente no le prometo nada, ni siquiera promesas de campañas. Lo que sí podría hacer es darle a cada uno que me vote una promo 2x1 de pelis nacionales, viste, para inculcar el cine nuestro. Los Bañeros, Mingo y Aníbal contra los fantasmas, Porcel, Olmedo, Minguito, Sandrini, las que son más de mi época, ¿me entendés, papi?”. A Austin Daniels siempre se lo entiende.